5 de septiembre de 2012

El clima necesario para el desarrollo de la Vid.


 El clima seco y los inviernos fríos benefician al desarrollo de la vid, y en los veranos, pese al calor, la altura donde se sitúan los cultivos favorece su calidad para la elaboración de vinos, valorados internacionalmente.
En la franja de los Andes como en el territorio desértico, durante el año puede apreciarse un gran calor durante el día y mucho frío por la noche. El Zonda es un viento cordillerano agudo y particular de esta región, que se ocasiona especialmente en invierno.
La Cordillera de los Andes influencia de manera decisiva el clima de buena parte del territorio argentino y principalmente de su zona vitivinícola. El cordón montañoso, determina que las masas de aire húmedo provenientes del océano Pacífico descarguen su humedad sobre territorio chileno y si penetran en nuestro país, el aire es seco y caliente, como es el caso del viento Zonda.
Uva marchita por el clima caliente.
En climas calientes, las cualidades aromáticas de las uvas pierden delicadeza y riqueza y los demás constituyentes del fruto no están muy bien balanceados y por eso, los vinos de mesa resultantes, no pueden compararse con los mejores vinos de regiones más frías.
Para su mejor desarrollo la uva vinífera necesita veranos largos, desde tibios hasta calientes secos e inviernos frescos. El desarrollo no se adapta a veranos húmedos, debido a la susceptibilidad de la vid a ciertas enfermedades criptogámicas y a las plagas de insectos que florecen bajo condiciones bajo condiciones de humedad. La vid tampoco resistiría frío intenso de invierno. La lluvia es conveniente durante el invierno, pero su falta puede compensarse por medio del riego.
Los siglos de experiencia e investigación de los cosecheros y enólogos, han establecido en forma definitiva el efecto del clima sobre las uvas para vino. El clima influye sobre en las velocidades de variación de los constituyentes durante el desarrollo del fruto y en la composición de éste al madurar. Un tiempo moderadamente frío con el cual la maduración se efectúa lentamente, es favorable para la producción de vinos de mesa secos, de calidad. El tiempo frío apoya un alto grado de acidez, un bajo pH y un buen color, y en muchas variedades de vinos de mesa, le da al fruto maduro el desarrollo óptimo de los de los constituyentes del aroma y el sabor precursores del bouquet y de las sustancias que dan sabor a los vinos.
Sin embargo las precipitaciones invernales en la Cordillera son importantes como reserva de agua. La humedad relativa es baja, lo que sumado a la escasa precipitación, constituye una condición excepcional para la calidad y el estado sanitario de las uvas, evitando el desarrollo de enfermedades criptogámicas. Los productos vitivinícolas argentinos son naturales y libres de residuos de pesticidas. Las temperaturas apropiadas y una gran heliofanía durante todo el año permiten que las distintas variedades de vid cultivadas puedan completar perfectamente su ciclo vegetativo, alcanzando sus frutos madurez industrial y niveles de calidad óptimos. Dado que la vid es una especie criófila, las temperaturas invernales bajo cero resultan muy convenientes para su reposo vegetativo. La ocurrencia de heladas tardías o tempranas es un factor climático limitante en determinadas regiones. 
Otro factor adverso a la vitivinicultura lo constituyen las tormentas de granizo, que en algunas localidades producen la pérdida de parte de las cosechas.
 Los suelos, en general, son de gran aptitud para el cultivo de la vid. Dada la extensión de la zona vitivinícola argentina, presentan diversas características, desde arenosos a arcillosos, con predominio de los suelos sueltos y profundos. Edafológicamente jóvenes, de origen aluvional (aluvial -coluvial), formados por el arrastre de material por el agua de los ríos, por la acción del viento y por los derrubios coluviales de las formaciones montañosas. Son suelos de reacción alcalina, ricos en calcio y potasio y pobres en materia orgánica, nitrógeno total y fósforo. Los valores de pH son por lo general próximos a 8. Las escasas precipitaciones obligan a que los viñedos se desarrollen irrigados por una compleja red de canales que distribuyen el agua proveniente de los deshielos cordilleranos que forman ríos de régimen irregular, cuyas crecidas estivales son captadas y almacenadas por medio de embalses y otras obras hidráulicas. Al aprovechamiento del agua superficial debe añadirse la captación de agua subterránea. La irrigación artificial permite que la provisión de agua al viñedo pueda efectuarse en los volúmenes y épocas más apropiadas, conforme al estado vegetativo de las vides y a la calidad que se busca obtener. 

Carla Corvalán

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Carla Corvalán

Araceli Soloa

Hidrografía de Cuyo

La región de Cuyo forma parte de la llamada "diagonal árida". En ésta región gran parte de los ríos provienen de los deshielos de la Cordillera de los Andes, teniendo su mayor caudal en verano y primavera. Estos son indispensables, porque las precipitaciones son escasas. El agua ha sido aprovechada a través de la construcción de oasis de riego, que han permitido una buena utilización del espacio. 
Las aguas de los ríos de cauce permanente, sumadas a la extraída de los acuíferos, son las que abastecen y hacen posible los oasis cultivados. Los ríos de la región pertenecen al Sistema del Desaguadero, que es el principal colector de aguas para consumo humano, para el riego y la generación de energía eléctrica, que abastece tanto a Mendoza como a otras provincias del país. Este sistema recibe aguas de todo Cuyo. 
 Los principales afluentes del Desaguadero son: el río Jachal, que se origina en los deshielos de la Cordillera frontal, el río San Juan que es el más caudaloso de estos ríos, donde se han realizado embalses y diques para la producción de energía y regulación del caudal, el río Mendoza que también es bastante caudaloso, y es aprovechado en tareas de riego para hacer la zona ampliamente productiva, el río Tunuyán, el río Diamante y el río Atuel, que también se encuentran embalsados. 
  En Cuyo, el agua es el condicionante para la vida económica, ya que además del cultivo de la vid, que es la principal actividad económica, esta región tiene producción agrícola-ganadera que dependen también de los sistemas de riego. 
 Los recursos hídricos de ésta zona deben ser considerados con especial atención, puesto que un tratamiento inadecuado de los mismos puede llevar a graves situaciones de difícil solución.

Luciana Ibañez

¡Un poco de humor para alegrar tu día!


-¿Cuál es el vino mas amargo? - Vino mi suegra.

-Una mujer anciana estaba tomando un vaso de vino sentada en un patio al lado de su marido y dice. "Te quiero tanto... no se como podría haber vivido todos estos años sin ti".
Al oír esto, el marido pregunta, "Sos vos o es el vino el que habla?”.
Y ella responde, "Soy yo, y estoy hablando al vino".
 Carla Corvalán 

-¿Que le dice una uva verde a una uva morada? Respira

- Muchas gracias -contestó. El vino no lo tomo en píldoras.
 Luciana Ibañez 

Un borracho se queda mirando aterrado a dos tipos que vienen por la calle.
- Por qué nos mira así? Es que nosotros somos gemelos
- ¿Los cuatro?

Había una vez , un señor que se había tomado muchos vinos .
Entonces al rato entra a la iglesia
Y escucha decir al Padre:
Hermanos, en este pueblo se ha perdido la fe.
Entonces Grita:
¡Nadie sale de aquí hasta que se encuentre!
Araceli Soloa

Entra un borracho a un bar y grita:¿Quién se cree muy gallo?Todos los que estaban dentro se quedan callados, pasa un rato y después de varias copas grita de nuevo.-¿Quién se cree muy gallo?
Y se para un hombre de 1.90 de estatura y le dice:
-Yo, yo me creo muy gallo, ¿Por qué?
Y le contesta el borracho:-No sólo para que me despiertes a las 5 de la mañana.

Entra un borracho a una bodega y le dice al encargado: "Quiero 1.000 litros de vino"...
 -Y el encargado responde: Pero, traerá usted envase?, no?
 Y el borracho le contesta:
 -Esta usted hablando con el..

Damian Tello